Exposición: “Pablo Picasso y el linograbado”

Una exposición de la Red Itiner de la Comunidad de Madrid.

¿Qué vemos?
Coincidiendo con el cincuenta aniversario del fallecimiento de Pablo Picasso, esta exposición reúne 45 linograbados originales en los que el artista aborda algunos de los temas que le obsesionaron a lo largo de su carrera: el universo taurino, la fiesta o bacanal y la mujer.
La primera edición de esta serie consta de una tirada de 50 ejemplares que expone, en 1960, la Galería Louise Leiris de París bajo el título Picasso: 45 gravures sur linoleum, 1958-1960. Dos años después se realiza una nueva tirada, esta vez de 520 ejemplares, de donde proceden las estampas que vemos en esta exposición.

¿Qué nos quiere decir la comisaria?
Marisa Oropesa, comisaria de la exposición, nos comenta: «Sin duda, es una oportunidad única poder mostrar estas obras al público que visita las exposiciones de la Red Itiner, y más en esta fecha tan importante, cuando se cumplen cincuenta años del fallecimiento del artista. En las décadas de los cincuenta y sesenta, el linograbado se convierte en una de las técnicas favoritas de Pablo Picasso, quien nunca dejó de experimentar e innovar a través de distintos medios artísticos y, durante su estancia en Vallauris, entró en contacto con el joven impresor Hidalgo Arnéra. Serán más de diez años de trabajo conjunto, y llegaron a realizar unos doscientos linograbados entre 1954 y 1968».

Datos interesantes de lo que vemos:

-El linograbado es una variante del grabado en madera (xilografía) en la que se utiliza una base de linóleo para crear el dibujo en relieve. El primer paso consiste en crear, con lápiz, la imagen sobre el linóleo, para después eliminar las zonas no dibujadas con materiales afilados, gubias, cinceles… Una vez generada la imagen en relieve, se entinta y se coloca el papel encima para, con la ayuda de un tórculo, producir la copia.
– La primera obra que vemos de la serie es del año 1958. Se trata del retrato de una dama a partir de una pintura de Cranach el Joven. Esta pieza es la única que respetará la técnica tradicional de estampación: seis planchas de linóleo grabadas para cada uno de los seis colores que el impresor estampa, sucesivamente, en la misma hoja de papel.
– Otra forma de aplicar el color en los linograbados es el método reductivo o a plancha perdida, muy utilizado por Picasso. Consiste en limpiar la plancha del linóleo, después de cada color impreso, y eliminar el dibujo (o parte de él) que no va en el color siguiente. Esta técnica requiere mucha planificación y una enorme capacidad de visualizar la obra final. Picasso desarrolló este método y logró, con una sola matriz, la impresión de varios colores.
– Las estampaciones de un solo color corresponden, generalmente, a una sola plancha grabada.
– Picasso grabó su primera estampa cuando tenía 18 años. En el momento de ejecutar la obra, grabó un picador de toros diestro, sin tener en cuenta que la imagen quedaría invertida cuando se imprimiera y que, por lo tanto, el picador sostendría la puya con la mano izquierda. Al ver el resultado, Picasso decidió titular a la obra El zurdo, enfatizando así este error tan inesperado: un buen ejemplo de que, de los errores, también se aprende.
– Hacer un grabado, una litografía o un linograbado es para el artista un momento en el que el tiempo se transforma: debe salir de su taller para ir a trabajar con otra persona; debe esperar el tiempo que requiere cada técnica para dar resultado, y, por último, debe esperar a que el artesano con quien trabaja en ese taller colaborativo termine la impresión.
– Después de la guerra, Picasso se muda al sur de Francia. Inicialmente, su grabado estaba limitado a los viajes que hacía a París o al complicado sistema de enviar las planchas, lo que quitaba mucha espontaneidad al proceso creativo. Pero pronto conocerá a Hidalgo Arnéra, un joven impresor afincado en Vallauris, a quien solicita su colaboración para realizar el cartel de la exposición anual de cerámica de Nérolium. Arnéra le sugiere trabajar con linograbado. Picasso experimentó con esta técnica, llegó a dominarla y no la abandonó nunca.
– «Picasso no pretende explorar un nuevo reino de objetos y formas, sino exponer las formas que había domina-do a los rigores de nuevas posibilida-des técnicas» (Wilhelm Boeck).
– «El buril, el punzón, la gubia en manos de Picasso se convierten en diamante, puñal o estilete para hendir la plancha de cobre o de cinc y dejarle huella para siempre» (Josep Palau i Fabre).

https://www.comunidad.madrid/actividades/2022/pablo-picasso-linograbado

Lunes a viernes: 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00. Sábado: 10:00 a 13:30